22/09/2017
Muchos tenemos miedo. A que usen nuestro nombre en vano para tomar decisiones equivocadas. La mitad de la ciudadanía en Cataluña no quiere la independencia, pero son invisibles para la Generalitat. La otra mitad quiere la independencia, pero la Moncloa los ignora. Unos y otros tenemos mala suerte: estamos en el momento más delicado de nuestra historia en las manos más torpes. Contra la ley unos, solo con la ley los otros. Mediocridad peligrosa.